Arroz inflado con chocolate

Elaboración

  • El arroz es un alimento que da mucho juego en la cocina. Como ya sabrás, no solo podemos elaborar con él platos salados, sino también deliciosos postres que no dejarán indiferentes a ninguno de tus comensales. Si eres un apasionado del cereal más consumido del mundo y quieres aprender una nueva receta de postre o snack a base de arroz que se incorporará a tu recetario habitual, sigue leyendo para descubrir cómo cocinar este delicioso arroz inflado con chocolate.

    Lo primero que haremos será reunir los ingredientes y cocer arroz en blanco. Para ello ponemos una olla con abundante agua y una pizca de sal y dejamos cocer el arroz Sabroz durante 18 min. Una vez transcurrido este tiempo, lo retiramos y escurrimos con ayuda de un colador fino.

    Ahora dejamos que seque para usarlo el día después. Si tienes prisa, otra opción es ponerlo a secar en el horno durante unos 45 minutos a 100 grados de temperatura. Para ello, extiéndelo en una bandeja de horno para que el secado de todos los granos sea homogéneo.

    Una vez que tengamos el arroz bien seco, sea a base del calor del horno, o dejándolo reposar durante un día, lo que haremos será freírlo poco a poco en aceite. Echamos aceite (puede ser de oliva o de girasol, dependiendo del sabor final que busques conseguir. Si quieres un sabor más suave, opta por el de girasol. Si por el contrario, no te importa que tenga un sabor más fuerte, apuesta por el aceite de oliva) en una sartén y, una vez que esté caliente, ve echándolo poco a poco. Verás que en cuestión de pocos minutos el arroz se va inflando. Es en ese momento cuando lo sacamos, con ayuda de una espumadera, lo escurrimos bien para eliminar restos de aceite y lo ponemos en un bol.

    Cuando ya tengamos todo el arroz frito y, por tanto, inflado, llega la hora de añadir el cacao. Para ello espolvoreamos un par de cucharadas de cacao en polvo sobre él, movemos bien para que todos los granos se cubran de delicioso chocolate y ¡ya lo tenemos! Listo para servir como postre, merienda, o un snack casero que picotear entre horas.

     

Vídeo receta

Arroz Inflado con Chocolate

Distintas maneras de presentar el arroz inflado con chocolate

Hay diferentes maneras en las que emplatar y presentar este arroz dulce, todas ellas a gusto del consumidor. La primera de ellas, y tal vez la más fácil, es hacerlo en formato choco pops. Te quedará parecido a unos cereales, perfectos para la merienda o el desayuno, con granos más o menos sueltos. También puedes, en lugar de bañar el arroz frito en un bol, extenderlo en una bandeja y aplicar desde ahí el chocolate. Una vez que esté seco, podrás cortarlo en barritas. Cómodo de comer e incluso de envasar tú mismo en casa para llevarlo a cualquier parte.

Otra de las maneras es hacer bolitas con el arroz de manera que quede un snack que puedas comer sin necesidad de cuchara, muy semejante al bombón. También puedes darle forma con unos moldes de silicona o de metal, de manera que a los más peques de la casa les resulte súper atractivo.
Un toque diferente. ¡Experimenta con esta receta!

Además de resultar una receta sencilla, este arroz inflado con chocolate es una receta con la que podrás experimentar en la cocina sin miedo al resultado. Puedes adaptarla a los distintos sabores que te apetezcan en cada momento. Si quieres que tenga un ligero regusto a canela, puedes introducir una ramita durante la cocción y ya lo tendrás listo.

Otra opción que le viene genial al chocolate es darle un pequeño toque cítrico, ya sea con naranja o con mandarina. Para ello, puedes rallar parte de la cáscara e incorporarla a la mezcla del chocolate y el arroz. La cantidad depende de la intensidad de sabor que busques. Incluso puedes jugar con distintos tipos de chocolate, utilizando chocolate en tableta en lugar de en polvo y derritiéndolo antes de echarlo sobre el arroz. De esta manera podrás tener arroz inflado con chocolate negro, chocolate con leche o incluso chocolate con cereza. El límite aquí está en tus propios gustos.

Beneficios del chocolate en tu dieta

Aunque de primeras el chocolate pueda parecer uno de esos alimentos que normalmente evitamos en nuestro día a día, lo cierto es que su consumo en cantidades moderadas tiene numerosos beneficios para nuestro organismo, no solo a nivel físico sino también a nivel mental.

El chocolate contiene ácido oleico por lo que, en las cantidades correctas, puede contribuir a la reducción del colesterol. También se trata de un alimento alto en fibra y el chocolate más puro tendrá un efecto saciante en nuestro organismo. Este mismo chocolate puro puede ayudarnos con nuestra salud cardiaca y a mantener perfecta nuestra piel gracias a sus componentes antioxidantes.

Por otro lado, se trata de uno de los alimentos que más pueden intervenir en nuestra salud mental. Esto se debe a que su consumo -siempre moderado- regula las hormonas del estrés. Ello se debe a la segregación de serotonina, más conocida como hormona de la felicidad, por lo que también nos servirá como un antidepresivo natural que nos aportará tranquilidad y una mejor concentración.