Receta de sopa de arroz blanca

tiempo de cocinado 40 min
numero de comensales 6 personas
Calorías por 100g: 214 kcal

Elaboración

  • Preparamos todos los ingredientes necesarios para elaborar esta sabrosa sopa de arroz blanca.

  • Pelamos y picamos la cebolla, los ajos y el jengibre en trozos pequeñitos para que sea más fácil de comer y se cocinen antes.

  • Ponemos el aceite en la cazuela, lo calentamos y añadimos todos los ingredientes picados anteriormente. Salamos y dejamos pochar unos 5 minutos hasta que la cebolla esté blandita.

  • Incorporamos las cucharadas de tomate frito y removemos.

  • Pelamos y picamos las zanahorias también en trocitos pequeños.

  • Ponemos en la cazuela con el sofrito las zanahorias picaditas, guisantes y el arroz. Removemos y cocinamos 1 minuto.

  • Cubrimos todo con el agua y cocinamos aproximadamente 20 minutos o hasta que comprobemos que las zanahorias están blanditas y el arroz cocido.

  • Probamos, salpimentamos al gusto, servimos y disfrutamos de nuestra completa sopa de arroz blanca.

Llegan esos meses de frío en los que solo queremos un plato caliente que llevarnos a la boca. Queremos que sea delicioso, distinto y agradable. ¿Deseas un plato apto para toda la familia e innovador? La Cocina Alternativa nos trae una sabrosa receta de sopa de arroz blanca, la oportunidad que buscabas para entornar tu cuerpo cuando solo buscas ese plato de cuchareo calentito que solo sabe darnos alegrías. ¡El éxito está asegurado con Sabroz!

Vídeo receta

Sopa de arroz blanca

Sopa de arroz blanca, un plato reconfortante

Es el momento del año predilecto por los amantes de los guisos y caldos, la época del año en el que podemos disfrutar de esos platos calentitos que nos ayudan a entonar el cuerpo después de los largos días de lluvia y frío. Y, por qué no, la pequeña recompensa después de una larga jornada de trabajo en la que solo soñamos con ese plato sabroso que nos da tantas alegrías.

¿Se os ocurre algo más reconfortante que un plato de sopa calentita? En esta ocasión, nos alejamos del tradicional caldo de verduras y damos con una receta apta para toda la familia, así como para vegetarianos y veganos. Esta sopa de arroz blanca es una delicia con todo el sabor de la huerta, ideal para compartir un momento reconfortante en familia mientras disfrutamos del mejor sabor. Además, es genial para esos días de resfriado en los que buscamos una receta que nos ayude a sentirnos bien.  

También puede ser una muy buena solución para los días en que podemos tener la tripa algo revuelta, puesto que el arroz, con su contenido en fibra, nos ayuda a regular el tránsito intestinal y a reducir posibles dolores gracias a sus propiedades antiinflamatorias.  

Y es que ya sabes que el arroz es uno de los cereales con más beneficios, ya que puede ser consumido incluso por las personas que no toleran el gluten, y nos aporta la energía necesaria para afrontar el día con fuerza dado su elevado contenido en hidratos de carbono. 

Lo creas o no, la sopa de arroz nos ha acompañado a muchos con el paso de los años. Las recetas tradicionales nos recuerdan a esos platos en los que se incorporaba el caldo del puchero y se le añadía un puñado de arroz, una delicia llena de sabor que muchos comían durante la semana para coger la energía necesaria para continuar con la jornada. Sin embargo, esta idea que te traemos hoy es muy más simple y tan solo necesitarás verduras.

Cómo hacer la sopa de arroz blanca perfecta

No tienes por qué preocuparte, porque esta receta es tan sencilla que se convertirá en todo un clásico de tu cocina. Para ello, tan solo tendrás que cortar los ingredientes e ir cociéndolos poco a poco. Los guisantes puedes utilizarlos frescos, por supuesto, así como puedes incorporarle otros ingredientes a esta sopa como puerro y apio.

Esta receta de sopa de arroz blanca con verduritas al jengibre es muy aromática, suave y completa. La podemos tomar como plato único como cena ligera o junto a una ensalada a la hora de la comida. Y si quieres darle un toque dulce a tu menú, prueba esta deliciosa tarta de arroz, una tentación deliciosa que le dará una vuelta de tuerca a tu cocina.

Un truco Brillante: ¡el jengibre!

Es un ingrediente propio de la cocina oriental, una raíz aromática muy utilizada y con toques cítricos. Puedes encontrarlo fácilmente en frutería y supermercados, ya sea en su versión en polvo o entero. Podrás rallarlo en tus recetas o añadirlo en tus platos en pequeños trozos. Tiene mucha intensidad de sabor y le dará un gusto muy especial a tus recetas.

Esta raíz tiene muchas y muy variadas propiedades. Entre ellas, hay quien dice que es un ingrediente que actúa muy bien como antidepresivo natural. También lo hace como antiinflamatorio y es muy bueno a la hora de hacer infusiones si tienes algún problema de inflamación o incluso infección de garganta.  

Existen varios tipos de jengibre. Quizás el más conocido sea el jengibre chino, que tiene un toque más picante que los otros, y que se suele utilizar entre los distintos tipos de sushi para limpiar nuestras papilas gustativas de distintos sabores.  

Los que tienen un toque más cítrico son los jengibres procedentes de regiones como Australia o la India. De hecho, se dice que el jengibre que viene de este último país es uno de los mejores que se pueden saborear en el mundo. En cuanto al más barato, es el que se cultiva en África, aunque dentro de este continente, la raíz amarga que más fama tiene es la que se produce en Kenia. El jengibre más caro, por otro lado, procede de Jamaica, y se caracteriza por tener un sabor más dulzón.  

El jengibre, incluso, tiene sus propias recetas, como las famosas galletas de jengibre, tan típicamente navideñas y que, sin embargo, tienen su origen en la antigua Grecia, cuando se mezclaba esta raíz con pan. Tiene también sus propias bebidas, como son la Ginger Beer (cerveza de jengibre, que es una especie de infusión de esta raíz que se fermenta. Tiene un sabor bastante fuerte) y el Ginger Ale, que es un refresco a modo de bebida carbonatada que puedes beber sola o acompañando a algún combinado. Lo cierto es que, aunque lo parezca, ninguna de estas dos bebidas tienen alcohol, por lo que puedes tomarlas sin problemas.