Paella de carne

tiempo de cocinado 35 min
numero de comensales 4 personas
Calorías por 100g: 513 kcal

Elaboración

  • Preparar todos los ingredientes para elaborar esta receta de paella de carne.

  • Dorar las costillas con unas gotas de aceite de oliva, a fuego medio.

  • Agregar el nabo y los ajetes troceados menudos.

  • Incorporar el arroz y rehogar el conjunto.

  • Agregar el romesco y mezclar.

  • Añadir el caldo caliente y cocinar durante 15 minutos.

  • Rectificar de sal y servir esta deliciosa receta de paella de carne.

Vídeo receta

Cuando llega el fin de semana, sabemos que es el momento perfecto para hacer esa receta que llevamos queriendo preparar toda la semana. Y sí, no hay nada más irresistible que una deliciosa paella. En esta ocasión nuestro querido Poli Delicious nos trae una opción ideal para los amantes de la carne, una impresionante paella de carne con la que conseguir que tu familia disfrute del mejor sabor sin tener que salir de casa. ¡Demuestra que eres todo un chef!

Además, no tendrás que pasar largas horas cocinando, pero sí podrás dedicar todo el tiempo que ahorras en la cocina a estar con los tuyos. Esta receta sin duda puede ser un acierto seguro a la hora de preparar un plato que guste a todos por igual. Y si hay algún ingrediente que no gusten a nuestros comensales, fácilmente podemos sustituirlo por otro o directamente eliminarlo. 

¿Y para el maridaje? Cualquier vino tinto joven le viene bien, ya que el sabor de la carne impregnará el arroz. Sin embargo, un vino blanco tampoco es mala opción para aquellos que lo prefieran. Incluso si hace mucho calor, un tinto de verano puede ser una elección estupenda para maridar este plato y refrescar el paladar entre bocado y bocado. 

La paella ideal y fácil para disfrutar de un fin de semana en familia

Ahora que llega el fin de semana, es el momento de que disfrutemos de una rica receta. Y qué mejor si es una deliciosa paella. Reúne a toda la familia entorno a este delicioso plato y compartir un buen rato. Aprovecha para demostrar que eres todo un cocinillas y que la paella es tu plato estrella. ¡Sorpréndelos a todos!

Esta receta de paella de carne es otra variedad de paella al que le vamos a dar un toque especial incorporando entre sus ingredientes la salsa romesco. Esta salsa es un acompañamiento típico de los calçots, una variedad de cebolla propia de zonas de Tarragona y que se caracterizan por cocinarse a la brasa y servirse junto a la salsa romesco. Si lo prefieres puedes sustituir esta salsa romesco por la tradicional salsa de tomate.

Además de las costillas de cerdo, vamos a preparar esta paella de carne con ajetes, y de la misma forma que con la salsa, puedes sustituirlos por otras verduras que prefieras como judías verdes o espárragos trigueros. ¡Todo a tu gusto!

Y si te ha gustado esta paella, puedes preparar también otras recetas de paella cuyos pasos te explicamos, como la paella de verduras o la tradicional paella valenciana. ¿Seguimos disfrutando de una deliciosa comida?

  • Cómo preparar la paella de carne perfecta

La paella puede ser un plato complejo, pero no tienes de qué preocuparte. Con las indicaciones que te dejamos para realizar esta receta, el éxito está asegurado. En esta ocasión nos hemos decantado por una costilla de cerdo, pero bien podrían ser de ternera. 

El sofrito adecuado es decisivo a la hora de elaborar un buen arroz. Sofríe bien la verdura para que esté al dente y termine de cocinarse durante la cocción del arroz. Añade la salsa romesco durante el sofrito para que coja la intensidad del sabor. ¡No hay más misterio!

  • Un plato tradicional versionado

La paella es uno de los platos más tradicionales de la gastronomía española, especialmente de la valenciana, de donde prácticamente es un sello de identidad. Su elaboración se remonta varios siglos atrás, cuando los campesinos y pastores de la zona de la Albufera valenciana optaron por cocinar el arroz con carne de animales de corral (principalmente el conejo y el pollo) y algunas verduras que podían cosechar fácilmente en sus huertas o en el campo. 

Desde aquel siglo XV del que se tiene constancia de las primeras paellas ha pasado mucho tiempo y mucha historia. Tanta que este plato ha llegado a ser una seña de identidad y ha encontrado numerosas versiones en distintas gastronomías. Y es que probablemente sea uno de los platos más imitados a lo largo del mundo. O al menos intentado, porque en muchas ocasiones los intentos han sido bastante fallidos o infructíferos. Y es que podemos encontrar recetas de paella con prácticamente todo: desde chorizo a boquerones, espinacas o colorante de tonos azules. 

Para los más puristas de la paella, la auténtica y original es simplemente la paella con pollo y conejo, pero la verdad es que en España se hacen arroces tipo paella de muy diversos componentes. Para los que sean amantes del mar y sus sabores, probablemente una paella a la marinera les sepa a gloria, mientras hay quienes prefieren una paella mixta con lo mejor del mar y lo mejor de la tierra. En alguna ocasión podemos encontrar también paellas teñidas de negro con la tinta de los calamares que la componen. 

Nosotros, en esta receta que te proponemos, hemos optado por una variación de la receta tradicional, sustituyendo la carne de pollo y de conejo por la de cerdo y los tradicionales garrafones por el nabo y la coliflor, así como un sofrito con ajetes. Y es que ya sabéis que en la variedad está el gusto. Y el límite en la cocina solo está donde tú quieras llegar. 

  • Un truco Brillante: ¡la salsa romesco!

Típica de la gastronomía catalana, es un manjar que casa a la perfección con las carnes. ¿No tienes la receta? Está hecha a base de toma, ajo, pan tostado, ñoras, pimentón, almendras y avellanas tostadas y sin cáscara, aceite de oliva, vinagre, guindilla y sal. Hidrata las ñoras para poder retirar la carne fácilmente. Asa los tomates y los ajos a 200 grados, los primeros durante 20 minutos, y los segundos durante diez. Retira la piel y las pepitas. Una vez estén fríos todos los ingredientes, trituramos fino con ayuda de una batidora, reservando para el final los toques picantes, que iremos incorporando según el gusto para moderar su intensidad. Como ves, ¡no tiene ninguna dificultad!