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Arroz con leche, un postre con historia
El arroz con leche es uno de esos postres que te hacen sentir en casa, pero seguro te sorprenderá saber que no nació en España, aunque aquí haya encontrado su hogar. Este dulce viajó desde Asia, su auténtica cuna, y se ha hecho un hueco en las sobremesas de medio mundo, conquistando corazones a cada paso.
La versión más tradicional es la que te proponemos en nuestra receta de pastel de arroz con leche, pero no te quedes solo ahí. Este postre es un camaleón culinario que se adapta a todos los paladares. Puedes encontrarte con recetas que le ponen pasas, ya sean de uva o ciruela, o incluso un toque de vino de Oporto para esos amantes del dulce sin remordimientos.
La conquista de América en el siglo XVI trajo consigo este manjar a Latinoamérica, donde se adoptó y transformó en variantes locales. Tal es el caso del arroz zambito peruano, que lleva chancaca, coco rallado, nueces y pasas. En tierras latinas y caribeñas, el coco y la leche condensada suelen ser los protagonistas, mientras que en el mundo anglosajón se impone una versión más sobria, menos especiada y a menudo horneada, casi como un pudding. En algunos casos se aromatiza con nuez moscada o una pizca de mantequilla para darle más cuerpo. La textura suele ser más compacta, buscando que el arroz quede firme y cohesionado. Aun así, mantiene intacta su esencia: ser un postre humilde que viaja bien entre culturas sin perder su alma reconfortante.
