Disponemos nuestros ingredientes favoritos para comenzar con la elaboración de esta receta.

Abrimos nuestro vasito de grano de avena cocida. Puedes usarlo directamente, o calentarlo 1 minuto en el microondas y dejar que se enfríe mientras cortamos el resto de los ingredientes.
Para la fruta, pelamos y cortamos el plátano y el kiwi al gusto. Puedes hacerlo en dados o, como en nuestro caso, en rodajas no muy grandes. Las moras y frambuesas las lavamos con agua, y podemos dejarlas enteras o cortarlas a la mitad. Vertemos la cantidad de chía que vamos a utilizar en un recipiente pequeño para facilitar su uso en la receta.

En primero lugar añadimos nuestro ingrediente principal, la avena cocida en grano de nuestro vasito Brillante, la cual usaremos como base o ingrediente principal de nuestro bowl.

A continuación, añadimos la fruta cortada en el orden que más nos guste. Puedes hacer composiciones utilizando los distintos colores para que además de delicioso, te quede un plato vistoso y bonito.

Luego añadimos el yogur y resto de frutas, aunque como hemos dicho antes el orden no importa, solo aporta valor estético. Otra posibilidad es incorporar a la avena el yogur, remover para que se impregnen bien todos los granos, y repartir las frutas por encima en un tercer paso. Lo mismo pasa con la chía. Podemos incorporarla en cualquiera de los pasos anteriores según tu gusto. Hay gente que la usa para adornar, como es nuestro caso, y otras personas la añaden después del yogur para que comience a hidratarse y saque esa capa gelatinosa tan característica que tiene.

En cualquier caso, después de estos pasos, habiéndolos dado en el orden que más os guste, podremos disfrutar de este maravilloso Bowl de avena con yogur, fruta y chía tan bonito, como nutritivo y fresco.
