Arroz caldoso con bogavante de la abuela

1 - Organiza bien tus ingredientes para el arroz caldoso

Vamos a preparar todo para esta deliciosa receta de arroz caldoso con bogavante. Primero, corta la cebolla morada, el pimiento verde y los dientes de ajo como si fueran para un festín. Ralla los tomates para que se fundan en el caldo y ten a mano esa cucharada mágica de pimiento choricero.

El bogavante es el rey del plato. Córtalo en varias partes y machaca las pinzas para sacarles todo el jugo. Infusiona las hebras de azafrán y verás cómo se potencia el aroma y color. Para más detalles, revisa nuestra guía sobre cómo infusionar el azafrán. Y no olvides tener listo ese arroz Sabroz, perfecto para estos platos caldosos. Aprende más sobre el mejor arroz para un arroz caldoso y conviértete en un experto.

2 - Dora el bogavante y crea un buen inicio

En una paella amplia, pon un chorro generoso de aceite de oliva a fuego medio. Cuando esté caliente, coloca las piezas del bogavante y déjalas dorar, dándoles un par de minutos por cada lado. Este pequeño show de cocina desprenderá su deliciosidad en milésimas de segundo.

Una vez dorado, retira el bogavante y resérvalo en un plato. Este sencillo proceso hará que tu arroz caldoso con bogavante y gambas se impregne de todo el sabor marítimo desde el primer instante.

3 - Sofríe las verduras para un sabor delicioso

Vamos a darle sabor a tu cocina usando el aceite donde doraste el bogavante. Echa la cebolla morada picada y sofríela hasta que esté translucida y caramelizada. Recuerda remover ocasionalmente para evitar que se queme. Esto puede llenar tu cocina con ese aroma inconfundible que nos transporta a la orilla del mar.

Luego, incorpora los ajos picados y el pimiento verde. Cocínalo todo juntos durante unos 5 minutos, hasta que estén tiernos. Este sofrito se convertirá en la base aromática, intensificando cada cucharada de este arroz caldoso con bogavante de la mejor manera. ¡Verás que no querrás dejar de hacerlo!

4 - Añade tomate y pimiento choricero al sofrito

Cuando las verduras ya estén tiernas y empiecen a despedir su dulce aroma, es el momento de añadir los tomates rallados y esa cucharadita de carne de pimiento choricero. Aquí es donde la magia empieza a tomar forma. Cocina durante unos 8-10 minutos a fuego medio. Mientras remueves, ve dándote el gusto de imaginar cómo se mezclarán todos esos sabores. Verás que el sofrito se vuelve denso y, como por arte de magia al remover, listo, sin rastro de líquido. Entonces, sabrás que es hora de dar el siguiente paso en la receta.

5 - Echa el arroz y el caldo infusionado

Llegó el momento especial de construir los sabores de tu arroz caldoso con bogavante. Añade el arroz Sabroz al caldito, revuelve un poco y deja que absorba el inconfundible toque del sofrito. Así, el arroz danzará con el bogavante y los demás personajes de este festín.

Es el turno de añadir el caldo de marisco caliente donde infusionaste el azafrán. Vierte suavemente mientras revuelves. Cocínalo a fuego medio, considerando que quienes estamos aquí, ¡sé que has quemado arroz alguna vez! Por eso, revisa que el caldo esté siempre en su justa cantidad.

6 - Reincorpora el bogavante y termina de cocinar

Cuando el arroz esté casi a punto, es hora de dar la bienvenida al bogavante. Coloca las piezas de este rey del mar sobre el arroz, como si decoraras una obra maestra. Ajusta la sal, porque no queremos sorpresas salinas, y deja que los sabores se integren durante esos últimos minutos.

Tras esto, retira la paella del fuego y, por favor, no olvides darle esos 5 minutos de reposo. Este descanso es esencial para que los sabores se queden a vivir en el arroz, terminando en un caldo que se siente como un abrazo de mar. ¿Preparado para impresionar? ¡Hora de disfrutar! Buen provecho.