Arroz cantonés: receta tradicional

Sofreímos la base

Comenzamos calentando una sartén grande a fuego medio-alto y añadimos un poco de aceite de sésamo. Una vez caliente, agregamos la cebolla morada cortada en brunoise. Es importante que la cebolla se cocine hasta que esté transparente y ligeramente dorada, lo que liberará su dulzura natural y proporcionará una base de sabor rica al plato. Este es el momento de incorporar el tocino ahumado cortado en trozos pequeños, permitiendo que se cocine hasta que esté crujiente.

A continuación, añadimos la pechuga de pollo cortada en tiras finas. Es crucial que el pollo se cocine uniformemente y se integre bien con la cebolla y el tocino, absorbiendo los sabores y asegurando que cada bocado esté lleno de gusto. Cocinamos hasta que el pollo esté completamente hecho y asegurándonos de que permanece jugoso y tierno.

Salpimentamos y mezclamos los ingredientes

Una vez que el pollo esté dorado, es el momento de salpimentar. Añadimos sal y pimienta al gusto, recordando que también añadiremos salsa de soja más adelante, que es salada. Removemos bien para asegurar que todos los ingredientes estén bien condimentados. Este paso es importante para que los sabores se fusionen antes de añadir el resto de los ingredientes.

Seguidamente, incorporamos los dos vasitos de arroz basmati ya cocido y frío; esto ayuda a que el arroz no se convierta en una masa cuando lo salteemos. Añadimos los huevos batidos y mezclamos muy bien. El huevo debe cocinarse rápidamente, envolviendo cada grano de arroz en una capa ligera y dorada, lo que aportará una textura rica y cremosa.

Añadimos los toques finales

Ahora es el momento de añadir la salsa de soja, que dará ese característico color marrón y profundidad de sabor al arroz cantonés. Vertemos la salsa uniformemente sobre el arroz y mezclamos bien para que todos los ingredientes se impregnen de su sabor. Introducimos las zanahorias cocidas previamente cocidas.

Finalizamos la cocción asegurándonos de que todo esté caliente y bien combinado. El secreto de un buen arroz cantonés está en la rapidez de la cocción a fuego alto, lo que ayuda a mantener la textura de los ingredientes mientras se realza su sabor. Justo antes de servir, decoramos el plato con un poco de cilantro fresco picado para añadir un toque de frescura y color.