Ensalada de arroz y frutos secos

tiempo de cocinado 30 min
numero de comensales 4 personas
Calorías por ración: 431 kcal

Elaboración

  • Preparamos todos los ingredientes para elaborar esta receta de ensalada de arroz y frutos secos.

  • Ponemos el agua a hervir con sal. Cuando esté, echamos el arroz y lo dejamos cocer 15 minutos.

  • Una vez cocido lo lavamos y lo escurrimos.

  • Ponemos el arroz en un bol y agregamos las pasas y la naranja cortada.

  • Después, añadimos los canónigos y, por último, las nueces peladas.

  • Rociamos toda la ensalada con aceite de oliva virgen extra.

  • Mezclamos todos los ingredientes y servimos esta receta ligera de ensalada de arroz y frutos secos.

  • Si quieres, puedes servirla como ensalada templada o como ensalada fría para los días más calurosos del verano. 

¿Dispuesto a seguir conociendo recetas que vas a revolucionar por completo tu cocina? En esta ocasión vamos a darte una idea fresca y deliciosa que te ayudará a darle un giro a tus ensaladas de siempre. Es perfecta para llevarla al trabajo y te resultará muy digestiva. Prueba esta opción que nos da Rezetas de Carmen, una ensalada de arroz y frutos secos que viene con ganas de seguir dándonos alegrías en la cocina. ¿Tienes ganas? Brillante te lo pone fácil.

Descubre las virtudes de una deliciosa ensalada de arroz

El arroz es un producto lleno de posibilidades. Lleva presente en nuestros hogares durante muchos años, ya sea en guisos o en paellas, pero también en postres, ensaladas y salteados. Hoy vamos a seguir disfrutando del arroz en su formato de ensalada, una idea excelente que puedes emplear no solo para salir de las típicas ensaladas verdes, sino también para darle un toque diferente a tu día. Además, la puedes llevar fácilmente al trabajo.

De cara al buen tiempo os animamos a preparar esta ensalada de arroz y frutos secos, aunque si queréis que os digamos la verdad, nos encantan las ensaladas todo el año, no solo en verano. Esta receta de hoy, al llevar naranja y frutos secos es muy completa y sana, el toque exótica que necesitas para hacer tu comida un festín de sabor. Si quieres que esté más fresca, alíñala cuando vayas a consumirla, de manera que el arroz vaya ganando sabor. ¡Una verdadera delicia!

El arroz es un ingrediente excepcional para preparar ensaladas porque admiten múltiples combinaciones de ingredientes, por ejemplo con esta ensalada templada de arroz y gambas o una deliciosa ensalada de arroz con aliño de mostaza. ¿Seguimos cocinando con Sabroz?

Cómo preparar una ensalada de arroz y frutos secos

Si has llegado hasta aquí es que quieres seguir descubriendo la magia de las ensaladas de arroz. Por ello, presta atención a esta receta que, aunque no tiene ninguna complicación, puede ayudarte a hacerle algunos cambios y adaptarse a ingredientes que tengas disponibles en casa o incluso nuevas ideas para futuros platos.

En esta ensalada de arroz y frutos secos os proponemos las nueces, pero puedes utilizar los frutos secos que más te gusten, como almendras o avellanas. Así mismo, si no tienes pasas, sustitúyelas por dátiles o ciruelas pasas para conseguir ese punto dulzón que contrastará con la receta.

¿Quieres un aderezo distinto? Prueba con una deliciosa vinagreta de mostaza y miel, que le dará un puntito picante y dulzón muy delicioso a tu plato.

Un truco Brillante: ¡las nueces!

Su mejor época es el otoño, cuando se recogen, pero aguantan muy bien a lo largo del año. Este fruto seco es una fuente de energía que podemos consumir cuando nos sentimos muy cansados. Un puñadito nos ayudará a recuperar las fuerzas y seguir afrontando las jornadas. Además, tal y como has descubierto en esta receta, combina a la perfección con ensaladas, dándole un toque crujiente al plato. Deliciosas y muy saludables.

¿Sabías que las nueces tienen numerosas aplicaciones, además de en el ámbito de la gastronomía? Este fruto seco tiene muchísimas aplicaciones a partir de distintos procesos que se llevan a cabo en laboratorios. A partir de las nueces se fabrican desde pinturas a productos cosméticos, pasando por tintes y hasta pasta de dientes.  

La madera de los árboles en los que crecen las nueces también tiene numerosos usos. Podemos verla mucho revistiendo algunas partes de las casas, como son puertas y suelos, y para la carpintería en general. Otro de sus usos es como madera elemental para la fabricación de las culatas de armas como las escopetas o los rifles.

La nuez, además, se asocia desde tiempos remotos a la buena salud, también la mental y el buen funcionamiento de la memoria. Y es que suele ser un alimento muy beneficioso para la salud, ya que entre su contenido nutricional podemos encontrar grandes cantidades de fibra, vitaminas del grupo B y C, proteínas y antioxidantes, entre otros elementos beneficiosos para la salud. También se dice que son un muy buen alimento para combatir la fatiga y el estrés y que puede llegar a influir hasta en los cambios de humor.  

Como dato curioso, se dice que nunca debes dormirte debajo de un nogal. Parece ser que de las nueces que todavía no están maduras emana una cierta cantidad de cianuro, que puede ser perjudicial para tu salud. Probablemente, si te quedas dormido bajo este árbol, acabes levantándote con dolor de cabeza. Esta cantidad de cianuro también es la responsable de que jamás debamos comer las nueces que todavía están verdes sin antes pelarlas. Aunque para estar más seguro, mejor que optes por los frutos que ya están maduros y aptos para consumirlos.  

Y es que en las nueces, la química juega un papel muy importante. Una de las cosas que debes tener en cuenta a la hora de usarlas en la cocina es jamás someterlas al calor, puesto que si lo haces liberarás ciertas reacciones químicas que hará que las grasas propias de las nueces se vuelvan tóxicas.  

Además puede ser que tengas alguna cierta intolerancia o alergia a este fruto seco, por lo que debes tener mucho cuidado antes de consumirlas sin más. Los frutos secos son uno de los grupos de alimentos con mayor cantidad de alérgenos e intolerancias, junto a los lácteos. Si se te inflama la boca o la garganta, o te aparece algún tipo de sarpullido, es el momento de dejar de comer nueces y acudir al médico.  

Pero si no tienes ningún problema con este tipo de alimentos, te animamos a que pruebes a jugar con ellas en los distintos platos y recetas que se te ocurran.