Arroz con judías pintas con chorizo: receta tradicional

1 - Un comienzo lleno de sabor

Para empezar, doramos la panceta y el chorizo en una sartén. Tras el sofreír las carnes, llega el momento de añadir los dientes de ajo, la cebolla y el pimiento verde, que aportarán intensidad al sabor del guiso. Este paso es crucial, ya que las verduras se impregnan de las grasas y esencias de la panceta y el chorizo, creando una base rica y muy completa para nuestro guiso.

2 - Un toque de color y sabor

El tomate triturado junto a una cucharada generosa de pimentón dulce es un giro que añade color y más sabor. El tomate, con su acidez y el toque de dulzura natural, junto al pimentón, que aporta suavidad y una profundidad ahumada, suman un sabor delicioso.

Después, añadimos el agua suficiente para tapar a las judías y al arroz. A continuación, sumergimos las hojas de laurel en el líquido, para que dejen en el guiso su aroma y esencia. Recuerda ajustar de sal según tus gustos y necesidades.

3 - El momento cumbre

Ahora, incorporamos las judías pintas y el arroz Sabroz y cada ingrediente comienza a absorber los sabores de los demás, transformándose en un plato completo y delicioso. Despuñes, con todos los componentes en su lugar, es el momento de ejercitar la paciencia. Debemos dejar que el guiso se cocine lentamente no solo asegura que los sabores se mezclen bien, sino que también garantiza que el arroz y las judías alcancen la textura perfectas.

4 - El toque final

Una vez que el guiso ha alcanzado su clímax, llega el momento de la presentación: agrega un poco de perejil fresco para darle un toque de color vibrante y una frescura que contrasta muy bien con el sabor de este guiso. ¡A, ahora sí, a disfrutar!