Quinoa con espinacas al toque casero

1 - Listo para cocinar, organiza tus ingredientes previamente

Antes de lanzarte a cocinar, asegúrate de tener todos los ingredientes a mano para que no te falte nada a mitad de la faena. Lava bien las hojas de espinacas frescas bajo el grifo, como si les estuvieras dando un baño a unas pequeñas joyas verdes. Así no soltarán agua de más en la sartén.

Luego, corta la media cebolleta en trozos pequeñitos. Esto ayudará a que se mezclen mejor en el sofrito y el sabor se distribuya homogéneamente por toda la quinoa con espinacas. Además, machaca el diente de ajo hasta que libere esos aceites deliciosos, como si revelara un secreto bien guardado. Y no te olvides de lavar los tomates cherry. ¡Si te apetece, córtalos por la mitad para que su jugo fresco eleve la presentación de tu obra maestra!

2 - Dale sabor al sofrito con cebolleta y ajo

Comencemos calentando un buen chorrito de aceite de oliva virgen extra en una sartén grande. Cuando veas que el ajo empieza a «bailar», añade la cebolleta picada. Remueve de vez en cuando para que no se quemen. El objetivo es que la cebolleta esté dorada y el ajo desprenda su aroma inconfundible, creando así una base deliciosa para tu quinoa con espinacas.

3 - Añade espinacas y tomates cherry para un buen toque

Cuando el sofrito esté listo, es hora de añadir las espinacas poco a poco a la sartén. No te preocupes si al principio parecen demasiado; verás cómo se encogen en poco tiempo. Mantenlas a fuego medio y revuélvelas con cariño para que se cocinen de forma uniforme.

Después, llega el momento de incorporar los tomates cherry cortados por la mitad. Aportan una frescura irresistible, además de un colorido perfecto. No olvides sazonar con sal al gusto, pero recuerda que las espinacas pueden concentrar el sabor de la sal, así que ajústalo con moderación.

4 - Mezcla la quinoa y deja que se impregne

Con las espinacas ya cocidas y en su punto, vamos a añadir los vasitos de quinoa «Brillante» a la sartén. Remueve con gusto, como si estuvieras componiendo una melodía culinaria, para que la quinoa se una cariñosamente con las espinacas y los tomates.

Deja que esta armoniosa mezcla haga magia a fuego bajo unos 20 minutos. Así, nuestra quinoa absorberá esos ricos sabores de las espinacas y el sofrito. Si ves que la cosa se seca, añade una cucharada de caldo o agua caliente. ¡Nada de dramas, que la cocina es para disfrutar!

5 - Decora y presenta para una explosión de color

Una vez la quinoa esté lista, presenta esta delicia en platos individuales o en una fuente grande, dependiendo de si es para ti o para varias bocas hambrientas, colocando una cama de espinacas debajo. Añade unas hojas frescas de espinacas y tomates cherry para ese toque de color y sabor que lo eleva.

Si buscas un extra de sabor, un chorrito de aceite de oliva virgen extra hará maravillas, dándole un brillo apetitoso a tu quinoa con espinacas. ¡Y voilà, ya está listo para sorprender a tus sentidos! ¿Quién diría que algo tan sencillo puede ser tan fabuloso?