Arroz chino fácil y delicioso: receta tradicional

1 - Preparar y organizar todos los ingredientes de este arroz chino

Antes de comenzar a cocinar, reúne y prepara todos los ingredientes que vas a utilizar. Esto te permitirá seguir la receta con fluidez y evitar olvidos.

Mide 200 g de arroz Brillante Sabroz, ideal para conseguir un grano suelto y sabroso. Pela y pica los 2 dientes de ajo, y corta 1 cebolla en brunoise para que se integre fácilmente durante el salteado.

Corta las 2 zanahorias en rodajas tipo rondelle, lo que aportará textura crujiente y color al plato. Ten preparados los guisantes —pueden ser frescos o congelados — y ralla una pequeña porción de jengibre, que añadirá un toque fresco y picante muy característico.

Casca y bate los 2 huevos, que luego se cocinarán en forma de tortilla. Pica también un poco de cebollino fresco y ten a mano salsa de soja y salsa de ostras, que darán el sabor umami inconfundible del arroz chino. Por último, prepara sal, pimienta negra y un poco de aceite de sésamo, fundamental para ese aroma tan especial del salteado asiático.

2 - Cocer el arroz hasta el punto perfecto

Coloca una olla con agua y una pizca de sal al fuego. Cuando rompa a hervir, añade el arroz Brillante Sabroz y cuece según las indicaciones del paquete, hasta que quede suelto pero firme.

Escurre bien y deja enfriar ligeramente para que no se apelmace durante el salteado.

Utilizar arroz cocido con antelación y ligeramente frío es ideal para lograr una textura perfecta en el wok. Así evitas que se rompa o se vuelva pastoso durante la mezcla con los demás ingredientes.

3 - Saltear las verduras con el jengibre<

En un wok o sartén amplia, calienta un chorrito de aceite de sésamo. Añade los ajos, la cebolla y la zanahoria, y sofríe durante unos minutos hasta que estén tiernos pero aún crujientes. Incorpora los guisantes y el jengibre rallado, removiendo bien para que libere su aroma.

Un sofrito bien hecho es la base de un arroz chino sabroso. Remueve constantemente para evitar que el ajo se queme y el jengibre se amargue.

4 - Preparar la tortilla y cortarla

En otra sartén, cocina los huevos batidos como si hicieras una tortilla fina. Cuando esté lista, retírala y córtala en tiras o cuadraditos, según prefieras. Esta técnica permite que el huevo se reparta bien en el arroz sin perder jugosidad.

Agregar el huevo al final garantiza que conserve su sabor y textura, aportando un contraste suave al conjunto.

5 - Incorporar el arroz y las salsas al sofrito

Agrega el arroz cocido al sofrito caliente y mezcla todo a fuego alto. A continuación, incorpora la tortilla troceada. Vierte un buen chorro de salsa de soja y unas cucharadas de salsa de ostras.

Remueve continuamente para que el arroz se impregne de todos los sabores y se dore ligeramente. Este paso es esencial para lograr el clásico sabor del arroz chino.

6 - Finalizar con cebollino y pimienta

Una vez mezclado todo, apaga el fuego y añade el cebollino picado y un toque de pimienta negra recién molida. El aroma final es fresco, ligeramente picante y muy apetecible.

Sirve caliente y disfruta de un arroz chino lleno de sabor, ideal para cualquier ocasión.