Delicioso Arroz con Leche de Coco y Mango

1 - Preparativos: deja todo listo y a mano

Antes de comenzar, es fundamental que tengas todos los ingredientes listos y bien medidos. Así, evitarás contratiempos en la cocina y podrás disfrutar del proceso con tranquilidad. Selecciona un mango maduro pero firme, uno que ceda ligeramente al tacto. Así te aseguras un dulce irresistible sin que se deshaga.

Asegúrate de contar con arroz Sabroz, pues es ideal para nuestro arroz con leche de coco y mango al absorber líquidos manteniendo su textura perfecta. No es casualidad que lo recomendemos también en nuestro blog sobre cuál es el mejor arroz para hacer arroz con leche. Además, si planeas decorarlo con ralladura de limón, recuérdalo: lávalo bien antes. Y si usas sésamo, tuéstalo un poco; ese toque elevará los sabores.

2 - Cocemos el arroz: ¡que quede en su punto!

¡Hora de darle un buen mimo al arroz Brillante Sabroz! Pon una cacerola a hervir con el agua, pero ojo, no olvides que la proporción es del doble de arroz. Deja que el fuego medio haga su magia durante unos 17 minutos. Queremos que el arroz con leche de coco y mango sea cremoso pero con todos los granitos enteros y suaves.

El truco está en no remover demasiado. Sabemos que te tienta darle unas cuantas vueltas, pero algunos granos podrían romperse y luego no4 lucirá igual en el plato. Para obtener una textura perfecta, puedes consultar estos consejos sobre cuál es el tiempo de cocción del arroz blanco. 

3 - Dale un toque dulce a la leche de coco

¡Seguimos con la receta! ¡Es la hora de endulzar! Dale un toque especial a este arroz con leche de coco y mango calentando a fuego medio-bajo la leche de coco con eritritol o tu endulzante predilecto. Remueve con cariño como si estuvieras en un concurso de cocina para que se disuelva totalmente. ¿Eres atrevido? Prueba miel o stevia, y sorpréndete.

Recuerda, es vital evitar hervir la leche; la textura y el sabor podrían cambiar drásticamente. Para un aroma encantador, coloca una rama de canela o una vaina de vainilla mientras se calienta, y retíralos justo antes de mezclarlo con el arroz. ¡Tu cocina olerá a celebración familiar!

4 - Mezcla el arroz con la leche cremosa

Cuando el arroz esté tierno y bien cocido, si por ahí queda un poquito de agua, escúrrela sin miedo. Luego, añade generosamente tres cuartas partes de la leche de coco al arroz y remueve con cariño. De esta forma, el arroz comenzará a absorber la leche y a transformarse en ese delicioso postre cremoso y tropical.

Aquí viene un truquito: déjalo reposar durante unos 15 minutos para que los sabores se mezclen y espesen. Así, te asegurarás una textura realmente cremosa. Si crees que merece un toque extra de dulzor o cremosidad, ajusta la cantidad de leche de coco o endulzante. ¡Nada de miedo, que está de rechupete!

5 - Preparamos la salsa espesa de coco

Para darle ese toque extra de textura que hará que tu arroz con leche de coco y mango destaque, toma el resto de la leche de coco y añade una cucharadita de maicena disuelta previamente en agua fría. No querrás grumos en tu postre, así que recuerda hacerlo con paciencia.

Seguidamente, calienta suavemente la mezcla en el fuego a baja temperatura, sin prisas. A medida que la salsa espese, lograrás esa consistencia cremosa que complementará la suavidad de tu arroz con leche de coco y mango. Puedes ajustar la cantidad de maicena según tu gusto, si prefieres una salsa más ligera o espesa.

6 - Presentamos el postre con un toque tropical

Ya casi has terminado esta deliciosa receta de arroz con leche de coco y mango. Sirve el arroz en boles pequeños, asegurándote de repartir bien la cremosidad del coco. Ahora, la magia: coloca finas tiras de mango fresco por encima, que no solo adornan, sino que aportan un toque espectacular.

Para terminar, pon un poco de ralladura de limón y sésamo tostado para completar esta experiencia tropical. La frescura del mango combinado con el arroz cremoso y este pequeño decorado de ralladura darán vida a un postre inolvidable.

¡Que lo disfrutes!