Arroz con alcachofas y verduras: receta fácil y rápida

1 - Preparar las alcachofas y las verduras

Empiezo pelando las alcachofas, quitando esas hojas exteriores que parecen de armadura hasta llegar al corazón. Las corto en cuartos y directo a un bol con agua fría y un chorro de limón. Así evito que se pongan feas antes de tiempo.

Este paso es clave para que mantengan su textura y sabor, sobre todo si usas alcachofas frescas. ¿Tienes solo de lata? Sin drama: escúrrelas bien y añádelas más adelante. Puedes ver algo parecido en este arroz con alcachofas y gambas.

Después, pica el resto de verduras para que sean agradables en boca.

2 - Sofrito inicial

En una cazuela bien amplia, caliento una cucharada de aceite de oliva. Va dentro la cebolla, y la dejo hacerse unos 5 minutos a fuego medio, removiendo de vez en cuando.

Ahora sumo el pimiento y la zanahoria. Remuevo bien para que se empapen del aceite y de ese juguito que ya soltó la cebolla.

Dejo que se cocinen hasta que estén tiernas y empiecen a caramelizar. Aquí es donde el plato empieza a prometer.

3 - Rehogar las alcachofas

Saco las alcachofas del bol, las escurro bien y a la cazuela. Las rehogo unos 5 minutos, con mimo, para que no se rompan.

Este momento es perfecto para que se mezclen bien los sabores. Las alcachofas absorben lo mejor del sofrito y devuelven un sabor increíble.

4 - Nacarar el arroz y verter caldo

Añade el Arroz Sabroz Brillante y mézclalo todo con alegría. Un par de minutos dándole vueltas hasta que los granos se vean brillantes.

Este paso, el de nacarar, es un clásico truquito: ayuda a que el arroz quede suelto y sabroso, y que coja bien el gusto de todo lo que has cocinado antes.

Vierte el caldo de verduras ya caliente. Cuando empiece a hervir, añade unas hebras de azafrán y ajusta la sal al gusto.

5 - Cocción del arroz y reposo

Deja el arroz a fuego medio-alto unos 5 minutos. Luego baja el fuego y sigue la cocción durante unos 13 minutos más, sin remover mucho.

Cuando veas que el líquido casi ha desaparecido y el grano está tierno, estás ahí. Es un arroz que pide cuchara, muy del estilo meloso.

Apaga el fuego y tapa la cazuela. Deja que repose unos 5 minutos, sin prisas.

Sirve el arroz bien calentito y corona con las alcachofas crujientes. Tienes un plato que no solo es saludable, sino que está lleno de sabor y color.