Conclusión
El arroz con callos es de esos platos que huele a domingo en casa. Tiene un sabor auténtico y un aroma irresistible que te hace salivar desde que empiezas a cocinar. Con unos pocos ingredientes y pasos que hasta el más despistado puede seguir, te aseguro que tendrás un plato delicioso en tu mesa bien pronto. Atrévete a redescubrir la cocina tradicional y deja a tus invitados boquiabiertos con esta receta que pide a gritos una buena sobremesa. Y si te va la carne de ternera tanto como a mí, echa un ojo al arroz frito con ternera y a este bulgur con ternera salteada, champiñones y almendras.
