Para cocinar arroz perfecto, añade un huevo batido al final de la cocción. Remueve bien para que el huevo se mezcle y adquiera textura, lo que hará que el arroz quede más cremoso y sabroso. Este truco realza el sabor y aporta proteínas al plato sin complicar la receta.


Gimbap, el irresistible rollo de sushi coreano que encantará tu mesa