Arroz frito con gambas al estilo casero

1 - Preparación de ingredientes para un delicioso arroz frito

Antes de empezar a cocinar, asegúrate de tener todo listo y organizado. Esto hará que el proceso fluya suavemente y obtengas un plato de arroz frito con gambas delicioso y bien cocido. Trocea la cebolla, 1/2 pimiento rojo y la zanahoria en brunoise, un corte ideal para que se mezclen perfectamente en tu salteado. Pela y pica también 1 diente de ajo, ese toque especial que no puede faltar.

Casca 1 huevo en un bol y bátelo con un poco de sal, porque arroces fritos con gambas al estilo chino siempre llevan un toque de huevo esponjoso. Si estás pensando que a lo mejor es mucho huevo, puedes descubrir cuántos huevos se pueden comer a la semana sin problema. Deja todo listo, incluidas las gambas peladas, la salsa de soja, sal, pimienta y un poco de cilantro fresco para el toque final si quieres agregar un poco de frescura.

Además, ten presente un vasito de arroz largo Brillante, que es la clave para el plato perfecto. Este arroz ya cocido está en su punto ideal para tu arroz frito, sin ese estrés de estar cruzando los dedos para que no te salga «enfurruñado». ¡Vamos a por ello!

2 - Haz una tortilla fácil y jugosa

Imagina que es sábado por la mañana y ya estás pensando en esa receta de arroz frito con gambas que vas a preparar. Bien, toma una sartén grande, añade un poco de aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio. Toma el huevo batido y cocínalo hasta que se convierta en una tortilla fina.

¡Listo! Retira la tortilla, córtala en tiras como un chef experto y resérvala. Ya verás cómo este truco aporta un toque perfecto al plato al final. ¿No es una maravilla cuando descubres estos pequeños detalles? Te aseguramos que tu arroz frito quedará para chuparse los dedos.

3 - Sofríe las verduras para un sabor increíble

En la misma sartén, si ves que necesita un poco más de aceite, no dudes en añadirlo. Te cuento, ahora toca saltear la cebolla, la zanahoria, el ajo y el pimiento rojo. Deja que estas verduras bailen a fuego medio hasta que estén tiernas y ligeramente doradas, aportando ese aroma a hogar.

Este sofrito será la base de sabor de nuestro arroz frito con gambas. ¿Alguna vez has quemado las verduras por descuido? No pasa nada, remueve con frecuencia para evitar que se quemen y lograr ese toque dorado perfecto que hará que tu plato destaque.

4 - Cocina las gambas hasta que estén perfectas

Cuando las verduras estén en su punto, es el momento de añadir las gambas peladas y remover con cariño. Cocínalas durante 2 o 3 minutos, viendo cómo se vuelven rositas, ese es su punto perfecto. No te despistes, o podrían acabar como chicle, y nadie quiere eso en su arroz frito con gambas.

5 - Calienta el arroz y combínalo todo

Calienta el vasito de arroz largo Brillante en el microondas durante 1 minuto. Créeme, este es el truco ideal para un arroz frito con gambas rápido y sin complicaciones. Cuando ya esté listo, incorpóralo a la sartén donde las gambas y las verduras ya han cogido ritmo. Suma la tortilla que cocinaste antes y mézclalo todo bien.

Para darle ese sabor a domingo y captar la esencia de la cocina asiática, sube ligeramente el fuego, permitiendo que el arroz se tueste. ¿Quién no disfruta con ese aroma a arroz frito junto a las gambas? Así conseguirás que este arroz frito sea el plato principal que todos recordarán.

6 - Agrega salsa de soja y sube el sabor

Viene la parte divertida: añade salsa de soja a tu gusto. ¿Sabes? Este es el momento en que el arroz frito con gambas se convierte en un auténtico plato de domingo. Pruébalo y ajusta con sal y pimienta si hace falta, ¡sin miedo!

Sube el fuego y cocina todo a tope durante unos 2 o 3 minutillos. Remueve como si fuera una danza para que todos los ingredientes se entiendan a la perfección. Verás cómo el arroz frito con gambas se llena de vida, al más puro estilo chino.

7 - Sirve tu arroz frito y a disfrutar del sabor oriental

Sirve tu arroz frito con gambas bien caliente, ¡y prepárate para que el aroma te haga la boca agua! Si te sientes creativo, puedes añadir un poco de cilantro fresco picado para darle un toque de frescura, como cuando abres una ventana y entra la brisa del mar.

Por último, elige tus palillos o una cuchara, y prepárate para disfrutar de tu obra maestra casera. ¿Quién diría que podrías trasladarte a China sin salir de tu cocina? ¡Buen provecho!