Salsas y vinagretas para darle un toque mágico
Para cada ensalada, hay una salsa o vinagreta que es como el compañero perfecto. En el caso de nuestra querida ensalada de bacalao, ¿por qué no probar con una vinagreta de piquillos? ¡Es más fácil de hacer de lo que parece y le va de maravilla!
Y si te sientes atrevido, dale ese toque extra con una fruta que es como una fiesta en la boca: la granada. Solo tienes que abrirla, sacar las pepitas y esparcirlas por la ensalada. Guarda un poquito, más o menos la mitad, y con eso haces un zumo para una vinagreta que será la protagonista secreta del plato.
Añadir fruta a las ensaladas no solo es un subidón de vitaminas, sino que ayuda a hidratarte y a combatir el calor veraniego. La ensalada de bacalao es sencilla, saludable y te da la energía necesaria para los días en los que el calor aprieta, pero las ganas de comer algo rico no se van.
El compañero ideal: el maridaje
Este tipo de ensaladas son las aliadas perfectas como entrante antes de un plato más contundente. Si eres de los que disfruta un buen vino, opta por un blanco bien fresco, con esos toquecillos afrutados que no roban protagonismo al resto de ingredientes.
O si prefieres, un espumoso puede funcionar fenomenal con el bacalao y el arroz. ¡Incluso un rosado podría sorprenderte!
Bacalao en salazón, un clásico que nunca pasa de moda
Ah, el bacalao en salazón…