Cocina el arroz integral con un toque de paciencia. Necesita más tiempo que el arroz blanco, así que déjalo hervir a fuego lento durante al menos 40-50 minutos. Usa el doble de agua que arroz y, al final, déjalo reposar cubierto unos minutos. Así lograrás una textura perfecta y sabor enriquecido.


Salteado de trigueros y gambas con arroz integral con quinoa