Para lograr un arroz más suelto, añade un chorrito de limón al agua de cocción. El ácido del limón ayuda a descomponer el almidón, evitando que los granos se peguen y dándole una textura ligera y esponjosa. Así disfrutarás de un arroz perfectamente cocido y delicioso.


Receta de Cuscús con Garbanzos: Sabores exquisitos en un plato saludable