El sofrito es el corazón de nuestro arroz caldoso con gambas, y su perfección comienza con la selección de aceite de oliva Consejos para un sofrito perfecto. Este oro líquido no solo aporta sabor, sino que también es el medio perfecto para transmitir los aromas y sabores de los demás ingredientes. Caliéntalo a fuego medio antes de añadir cebolla finamente picada. Una vez que la cebolla esté translúcida y ligeramente dorada, es el momento de añadir ajos y pimientos. Estos deben cocinarse hasta que estén tiernos, pero sin perder su vibrante color. La incorporación de tomate triturado es el siguiente paso, y aquí radica el secreto de un sofrito excepcional: debe cocinarse lentamente. La paciencia es clave, ya que el tomate debe reducirse, concentrando sus sabores y mezclándose con la cebolla, el ajo y el pimiento, hasta obtener una consistencia espesa y rica en sabor, que servirá como la base perfecta para nuestro arroz caldoso.
Este sofrito no es simplemente un paso en la receta; es una celebración de la cocina mediterránea, donde cada ingrediente es respetado y llevado a su máxima expresión. Al seguir estos pasos y dedicar el tiempo necesario a cada uno, aseguramos que nuestro arroz caldoso con gambas sea no solo un plato, sino una experiencia que hable de tradición, sabor y amor por la cocina. ¿Quieres ser un experto en sofrito? Pues consulta este blog sobre cómo hacer un delicioso sofrito para paella e impresiona a tu comensales con una auténtica paella valenciana.